domingo, 29 de junio de 2014

Fiesta de final de curso de la guardería



Cada año cuando llega el final de curso la guardería a la que va mi niña organiza una barbacoa familiar, padres y niños nos juntamos con las educadoras de la guardería y disfrutamos de una jornada de actividades y comilona para despedir el curso escolar.



Es una cita a la que no hemos fallado desde que Júlia entro en la guarde y este año al ser el último no podía ser diferente. Mi pitufa en septiembre ya da el salto al colegio y con gran tristeza y agradecimiento tendremos que despedirnos de sus educadoras, a las cuales les doy mi más sincero agradecimiento por haber cuidado y colaborado enormemente en la educación de mi hija, con un amor y entrega infinita que me han dado una gran seguridad y aprecio hacia ellas.


Esta barbacoa que preparan en la montaña las educadoras la acompañamos con aperitivos y primeros platos elaborados por los padres, una gran variedad de sabores que hacen de esta fiesta una especie de “reunión familiar” llena de ensaladas, quiches lorraine, empanadas, etc.

Al finalizar la comida llega el momento de los postres… Y con él el Concurso de Pasteles!!!!!
Como no podía ser de otra manera cada año he participado encantada y esta vez, en un día donde el cielo amenazaba con lluvia, decidí hacer una tarta arcoíris para dar color a la jornada.

 
El piso inferior era un bizcocho de chocolate con relleno de chocolate y bolitas de cereal cubierto de chocolate blanco. El piso superior (el arcoíris) era un bizcocho de piña y lima-limón con relleno de vainilla y coco.


Gané el premio al pastel más original, pero el verdadero premio ha sido tener a mi hija en la mejor guardería que existe.
Gracias por todo!

jueves, 26 de junio de 2014

La dulzura de un bebé



En la vida hay cosas que nos provocan una sensación de dulzura y de ternura, que nos dibujan una sonrisa y nos dan ganas de achuchar incontrolablemente... los peluches son una de ellas.

A mí me encantan y me trasladan a la niñez, cuando jugaba con ellos horas y horas, los cuidaba y dormía completamente sepultada por ellos para no dejar ninguno fuera de la cama. Ahora lo revivo con mi niña, a la que veo hacer exactamente lo mismo y con la que disfruto de sus juegos.

Pero además de los peluches los bebés me provocan esa misma sensación, su olor, la suavidad de su piel y sus caritas redondeadas, esas manos y esos piececitos que te dan ganas de morder jejeje.

Así que cuando me encargaron un pastel para el bautizo de la pequeña Alexandra lo tuve muy claro: el pastel tenía que reflejar la ternura extrema que nos provocan los bebés. Así que nada mejor que decorarlo con un precioso conejito de peluche elaborado con fondant.
  
Os juro que este conejito me ha robado el corazón, lo hubiera adoptado sin pensármelo dos veces!



El pastel lo completé con la típica ropita de bebé tendida, un body, unos patucos, el osito de peluche, el pijama, un vestidito, un gorro, baberitos... todos secándose al sol.









En esta ocasión me decanté por una gama de colores rosas y beige, que nos dan esa sensación de calidez y aportan el toque de elegancia que precisa la ocasión.


Como era un pastel destinado a los niños asistentes al bautizo lo hice de chocolate, relleno de nutella y lacasitos (esta combinación nunca falla!).

Espero que lo disfrutaran mucho los comensales y desde aquí felicitar a la pequeña Alexandra en un día tan especial.

viernes, 20 de junio de 2014

Cupcakes Monstruo de las galletas



Lo prometido es deuda: Aquí os enseño los cupcakes que llevé a la guardería para que celebraran el cumpleaños de Júlia.

 


Tratándose de niños pensé en hacerles algo divertido y fácil de comer, así que unos cupcakes eran la solución perfecta! Y realizarlos a imagen y semejanza del monstruo de las galletas (todo un clásico en decoración de cupcakes) era la mejor opción, teniendo en cuenta que el azul es el color favorito de Júlia.
Así que a eso de las 4 de la madrugada estaba yo poniéndole los “pelos” a los cupcakes, pintando ojos y dándoles de comer su famosa galleta con chips de chocolate.


Los cupcakes eran pequeñas piñatas de chocolate que escondían lacasitos en su interior (éxito asegurado entre los pequeños). Utilicé un frosting de vainilla teñido de azul para la decoración y fondant para los ojos.


A mí me encantó el resultado y aunque me costó varias horas de sueño mereció la pena!


martes, 17 de junio de 2014

EL Cumpleaños de Júlia



Como ya os dije en el anterior post, este año mi hija ha celebrado 3 veces su cumpleaños: una con la familia, otra en la guardería (que os enseñaré en la próxima entrada) y EL cumpleaños!
Si, porque si de una celebración se va a acordar la enana será de este cumpleaños, por dos motivos: es el cumpleaños que celebramos invitando a todos sus amiguitos y es la fiesta de su personaje favorito Peppa Pig.




Para quien no la conozca todavía (será porque no tiene hijos) se trata de la protagonista de una serie de dibujos animados infantil que gira en torno a la vida de la familia Pig (papá Pig, mamá Pig, George y Peppa Pig) que nos muestran situaciones cotidianas rodeados de sus amigos animales. Es una serie muy dulce, sin ningún atisbo de violencia y que es muy apropiada para los más pequeñines de la casa.
Mi hija está súper enganchada, hasta el puto de que va haciendo ruiditos de “cerdita” imitando a su rosadita amiga. Así que como no podía ser de otra forma, por expreso deseo de Júlia, organizamos el festejo inspirado en Peppa Pig.

Como esta ha sido la primera fiesta de cumpleaños que hemos celebrados con sus compañeros tuve muy presentes sus preferencias culinarias (vamos... los ganchitos y patatas) y diseñé la mesa dulce teniendo en cuenta al “público” asistente. Por suerte, como los ilustres invitados son pequeñines todavía, venían acompañados por sus padres, para disfrute de los cuales realicé parte de los dulces.
 


Como podéis ver mi casa se llenó del espíritu Peppa (que una semana después sigue decorando el salón jajajaja) y tras vaciar literalmente el comedor (televisión, aparatos, decoraciones...) utilicé el mueble para ubicar la mesa dulce.




En ella podíamos encontrar tanto dulce como salado.
Pizzas Peppa Pig, en este caso cortamos pequeños cuadrados de pizza de queso y bacón y unas cuantas las cortamos con la forma de la cerdita para “incitar” a los peques a comerlas.

 

Sándwiches de jamón y queso, que para variar un poco la tónica de los cumpleaños infantiles, esta vez los ofrecimos con el queso fundido.



Palomitas, ganchitos, patatas y olivas en primera fila, porque sin duda es lo que más atacaron los enanos.Y los sugus, los árboles de chuches y los lacasitos al fondo de todo (no queremos ningún empacho).




Piruletas de plátano con chocolate...mmmmmm.....mmmmmm....una combinación de sabores que me encanta (y por lo que pude ver no soy la única).



Nubes con chocolate, reconozco que las hice porque quedaban muy monas...pero la verdad es que eran además una delicia!



Macarons rellenos de crema de vainilla y coco. Como en la fiesta familiar fue el sabor que más triunfó lo repetí en esta fiesta (añadiendo un poco más de coco jejeje) Buenísimos!



Cake Balls de carrot cake. Puestos a hacer bolas (que su trabajo dan) pues ala! Para las dos fiestas.



Galletas decoradas con glasa real de Peppa Pig. Ayyyy que ternura (ahora ya empiezo a olvidar las 4 horas y media que me pasé haciéndolas ufffff) quedaron preciosas.


 Y.... el PASTEL! Con tooooooodos los amigos de Peppa y su familia.

 
Y es que al principio solo iba a hacer a la familia, pero luego me dije: ¿Cómo no vas a poner a su mejor amiga la ovejita Suzy Sheep? Y claro, una cosa lleva a la otra, y pensé que si me dejaba a algún personaje mi hija se daría cuenta!!!!! Porque se los sabe todos con nombre y apellidos! Así que nada... a trabajar y llenar el pastel de amiguitos de Peppa llevándole sus regalos de cumpleaños.




El pastel era de chocolate, relleno de chocolate (es que yo a mi hija le hago caso jajajaja). El piso inferior iba relleno de malteses para dar un toque crunch al bocado.

También teníamos preparada la piñata llenita de Schoko-Bons y monedas de chocolate: como locos todos cogiendolos a puñados jajajaja


 Y para regalar a sus compis teníamos preparadas las míticas bolsas de chuches y unos botecitos de pompas de jabón personalizados para la ocasión.




Los niños se lo pasaron bomba, los padres no nos separamos de la mesa dulce ñaaaammm y me hija no dejó de sonreír. Ha sido sin duda el mejor cumpleaños y creo que lo recordaremos por siempre.

Gracias a todos los que vinieron y a los que no pudieron estar espero que este resumen les haga participes de la fiesta.