Preparar la fiesta de cumpleaños de tu hij@ es una
oportunidad fantástica para dar rienda suelta a nuestras fantasías
artístico-culinarias, decorar a más no poder y disfrutar del resultado junto a
tu familia.
Así que decidida a celebrar el primer cumpleaños de mi peque
como se merece empecé con mucha, no, mucha no, muchísima antelación, a
documentarme y devorar información para poder hacer una mesa dulce para la
ocasión.
Y como soy “más bruta que un arao” y no tengo medida decidí
completar el festín con una mesa salada y otra de bebidas, ala, por si alguien
no explotaba con la de dulces voy a cebarlos un poquitín más jajaja
Para toda mesa dulce que se precie se ha de seguir una
temática, que vaya desde las invitaciones a la decoración global de la fiesta y
los dulces. Para decidirme no tuve más que mirar a mi enana… nuestra ratita! Y
de ahí salió la idea de que todo girara en torno a una dulce ratita.
Inspirándome en eso busqué ilustraciones diversas y encontré
en Internet unas ratitas de fieltro preciosas, sencillas, tiernas y graciosas
como mi pequeñaja. Con la idea en la cabeza diseñé la ratita y las invitaciones
de tan importante acontecimiento.
Para que la decoración no resultara cargante opté por
centrarme en la ratita y utilizar como complementos el estampado a cuadritos
Vichy rojo y el de topitos en los mismos tonos. Un poquito de hierva le da la
alegría y una setita para armonizar el conjunto.
Con la invitación hecha solo quedaba copiar el estilo para
la decoración del salón.
Opté por realizar unos cuantos pompones de papel de seda
para colgar del techo en los mismos tonos, rojo y verde, que dan un aire
festivo y unas cuantas guirnaldas rojas para rematar. Unos globos rojos y
verdes libres por el suelo para que la peque jugara con ellos y listo!
Las mesas las vestí en esta ocasión con césped artificial,
que queda mucho más original y alegre que un mantel, y además me iba al pelo
con la temática. Hice las tarjetitas con los nombres de los diferentes dulces y
platos y una gran guirnalda para colocar en la pared felicitando a la
homenageada.
Es importante respetar la gama de colores, tanto en vajilla,
bandejas y complementos, aunque te cueste la misma vida encontrar las
servilletas con las que sueñas!
Bueno y si decorar el salón ya os parece tarea de chinos ni
os cuento lo que es pasarte una semana entera encerrada en la cocina… el horno
echando humo! Y no es que se me quemara nada eh! Vamos que casi se me quitan
hasta las ganas de comer…
Para que os hagáis una idea:
En la mesa dulce había:
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Pastel decorado
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Cupcakes de chocolate con nutella
-
Muffins de frutos rojos
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Cake Pops de chocolate
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Rocas de chocolate negro, blanco y con leche
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Palmeritas
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Galletas decoradas
-
Copas de gelatina
-
Muuuuuuuchas chucherías
En la mesa salada.
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Quiche Lorraine
-
Tabla de embutidos
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Nachos con guacamole
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Croissants con jamón y queso
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Pan con tomate
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Patatas, chetos y demás
En la mesa de bebidas:
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Refrescos
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Zumo de naranja natural
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Batido de mora
-
Cafés e infusiones
-
Bombones de chocolate negro con almendras
El pastel es siempre el rey del cumpleaños, esta vez hice un
pastel de dos pisos. El inferior era un bizcocho de buttermilk de chocolate
relleno de suisse merengue buttercream de nutella, ñammmmm. El de arriba y en
forma de seta era bizcocho de frutos rojos con mascarpone y chocolate blanco,
definitivamente delicioso.
Modelé la ratita con fondant y listo para presidir la mesa.
Otro día con más calma os iré haciendo paso a paso las
recetillas, por el momento os dejo con el resultado final.
Fue un éxito y la “ratita” se lo pasó en grande con sus
globos y comiendo de todo… y esa es la mejor recompensa.
PD: Tengo que decir que a parte de TODO lo que había sobre
las mesas me quedaron unas cuantas cositas en la recamara (y es que no cabía
nada más sobre las mesas grrrrr) entre ellas unas mini hamburguesas y pizza.
PD2: Y encima había hecho un mega pastel de queso con
arándanos que no estuvo presente pues decidió suicidarse nada más salir del
horno…
