La llegada de la primavera nos llena de alegría y esperanzas de ver de nuevo el sol, las flores crecer y los pajaritos cantar... pero la cruel realidad es que nos llega cargaita de lluvía, nieblas matinales y cielos grises.
Así que para dar un poco de color a estos días lluviosos os traigo mi último trabajo.
Se trata de una tarta súper colorida, festiva y alegre para celebrar el primer cumpleaños de Jimena.
Como podéis ver es una monada, un elemento más de la decoración de la fiesta.
El diseño del pastel es obra de la madre de Jimena, que siempre se involucra en el proceso y aporta su creatividad al proyecto.
Mi trabajo consiste en hacer de ese boceto una realidad dulce y deliciosa a la que poder hincarle el diente durante la celebración.
El toque exótico de este pastel no está en su colorido, está en su sabor. Se trata de un bizcocho de maracuyá bañado en almíbar de maracuyá y relleno de buttercream de mango. Boom!!!! una auténtica explosión se sabores.
A ellos les encantó, qué os parece a vosotros?
