Con ella acabó mi maratón de pasteles jijiji, y quizás porque era la última
me dio una especie de melancolía… me recree todo lo que pude haciéndola,
disfrutando de cada detalle… tenía todo mi tiempo para ella y la verdad es que
me divertí bastante dándole forma.
Este pastel era para el cumpleaños de Adrià, el hijo de una compañera de
trabajo que soplaría 19 velitas (bueno en su caso una….pero lo que cuenta es la
intención jejeje). Como le gusta tocar la guitarra lo tuve clarísimo desde un
principio, el chaval tendría su tarta guitarra!
En este caso el bizcocho fue de frutos rojos, con almíbar de vino blanco y
frambuesas, y relleno con crema de mascarpone, chocolate blanco y frambuesas
Mmmmm (léase que me estoy relamiendo)
La verdad es que quedó bastante grande, y me las vi y desee para encontrar
una base donde ponerla, pero bueno, un poco de bricomania y lista!
Al cumpleañero le encantó, hasta llamó para darme las gracias, que majo él!
En nada celebro mi primer cumpleblog!!!!!!!!!!!! un añito ya que llevo con Andorcake y os tengo preparado algo especial...
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