Os lo dije… no tardaría en caer una nueva tarta de Bob
Esponja jajajaja
Y es que este personaje tiene a los niños enamorados y
completamente obsesionados con sus aventuras.
Esta vez el encargo era muy especial, me lo hizo una amiga
para el cumpleaños de su hija. Qué honor!!! La pequeña Lluïsa cumplía 5 añazos y lo celebraríamos
con ella en la súper fiesta que sus papis le tenían preparada.
Por supuesto el pastel era una sorpresa y por la cara que
puso le encantó!
Decidí hacer dos bizcochos diferentes, uno dirigido a los
papis que asistíamos a la fiesta y otro pensado para los peques (aunque ya os
contaré como acabó…)
El pastel para padres era la base (o sea el mar…con sus
corales, estrellitas, conchitas, algas y arena), era un bizcocho de chocolate
negro relleno de butterswiss de Nutella.
El pastel para los peques (véase el mismísimo Bob Esponja en
persona) era mitad bizcocho de chocolate negro, mitad bizcocho de chocolate
blanco, relleno con la misma butterswiss de Nutella y Lacasitos!!! Una delicia…
una auténtica delicia…que nos quedamos sin probar oooOOOOhhhhh. Y es que la
reina de la fiesta decidió que NADIE podía tocar su Bob Esponja querido
jajajaja
Así que grandes y pequeños dimos buena cuenta del fondo
marino de chocolate negro y el delicioso Bob Esponja esquivó a su destino y
disfruta tranquilo de unas vacaciones improvisadas en el congelador de mi
amiga!
Hasta muy pronto…
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