Hace unos meses preparé la mesa dulce para su bautizo y hoy nos toca celebrar su primer añito.
La verdad es que parece mentira como pasa el tiempo, ver como van creciendo los enanos nos envejece de golpe...
El encargo tenía pocos requisitos y me daba la posibilidad de dejar volar la imaginación y darle la sorpresa a los padres. Simplemente eligieron el sabor, bizcocho sin gluten de chocolate y relleno de dulce de leche, y la gama de colores pastel.
Y entonces me puse a trabajar y este fué el resultado:
La pequeña osita que soplaba también su primera velita.
Espero que os guste este nuevo trabajo.
Nos vemos prontito.
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